** Este curso no solo permite a los jóvenes la oportunidad del primer empleo en el área de alimentos y bebidas, sino que, además, estimula la gastronomía venezolana
NADIA LOBO
Cumpliendo con el cronograma establecido con la formación tanto teórica como práctica, el Inces-Mérida culminó de manera satisfactoria la capacitación en el área de gastronomía a través de los cursos: Repostería y Panadería Doméstica donde participaron 18 jóvenes aprendices del Programa Nacional de Aprendizaje (PNA), vinculados con la Gran Misión Chamba Juvenil.
La formación se desarrolló en las instalaciones del centro de formación socialista (CFS), Eliézer Otaiza de la ciudad de Mérida, a cargo de los maestros técnicos productivos (MTP) Ligia Vera en Repostería y Sobeida Molina en Panadería Doméstica, quienes cuenta con una amplia experiencia en el área de alimentos y bebidas.
La MTP Ligía Vera explicó que el curso Repostería ha venido cumpliendo con sus diferentes temáticas desde como usar equipos y utensilios que conforman la dotación básica para la preparación de tortas, pasando por las normas de higiene y seguridad, hasta desarrollar el proceso de preparación y decoración de las tortas.
“La formación consistió en la preparación de diferentes tipos de tortas utilizando insumos autóctonos como el cambur, piña, zanahoria y chayota; así mismo, conocieron las técnicas para la elaboración de hermosos pasteles, utilizando una variedad de bizcochos, cremado de masas, merengues francés, italiano y simple, entre otros método básicos de la repostería, aseguró la MTP Vera.
TAMBIÉN EN PANADERÍA
Por su parte, la MTP Sobeida Molina destacó que durante la dinámica del curso de Panadería Doméstica, los participantes han venido preparando diferentes tipos de pan de trigo en sus diferentes versiones y presentaciones, tanto dulce como salado. “También han sido capacitados para utilizar otros tipos de harinas e ingredientes frescos como frutas y hortalizas, que les permite conocer y utilizar productos cosechados en la zona de manera ecológica”.
Explicó Molina que durante las clases los participantes pueden reconocer y fichar no solo los tipos de harina, sino también la variedad de levaduras que se pueden utilizar tales como la clásica, comerciales o químicas y las naturales, éstas últimas son las mas recomendadas, ya que son fermentos a base de ingredientes naturales.
Los estudiantes, señaló la maestra Inces, “ya están en capacidad de saber clasificar y diferenciar los materiales e ingredientes básicos de los insumos y los aditivos que se requieren para la producción de todo tipo de pan”.
Para el cierre de curso, los participantes realizaron diferentes tipos de pan tales como: francés, canilla, campesino, piñita, de pimentón, ajo porro y cebollín, zanahoria, pan de banquete, pan azucarado, golfeados, así como buñuelos, entre otros.
Finalmente, la maestra panadera destacó su emoción y satisfacción porque los jóvenes aprendices están listos para enfrentarse a su primer empleo, pues el Inces ha hecho todos su esfuerzos por ofrece una formación integral, que le permita facilitarles a los participantes cualquier trabajo que puedan desarrollar en el área de alimentos y bebidas.