** En sus breves palabras el Jefe de Formación Profesional del Inces Trujillo sostuvo, delante de los presentes, que el reto planteado por el Covid-19 obligó a los trabajadores del ente a demostrar las capacidad para resolver problemas puntuales como las clases presenciales y como proseguir con una programación anual que amenazaba la efectividad de la atención al público trujillano
En el marco del proceso de transformación nacional que atraviesa el Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista se presentó el balance trimestral de las formaciones que hasta la presenta fecha lleva este organismo, el cual registra un numero de 1.180 en su transitar desde el pasado mes de Enero hasta Julio.
La información la suministro Marcos Ortega, jefe de Formación Profesional del Inces-Trujillo quien en una breve intervención a directivos y facilitadores del organismo ofreció detalles de lo que ha sido el funcionamiento del instituto en medio de la pandemia mundial que obligó a tomar medidas rápidas para lograr la operatividad del mismo.
En su presentación, Marcos Ortega explicó que estos 1.180 corresponden a los programas Agrícola, Certificación Ocupacional, Industria y Construcción, Nuevos Modelos de Gestión, Penitenciario, Textil, Turismo, Unidad Básica y Programa Nacional de Aprendizaje, pese a los grandes obstáculos que se pudieron sortear y las barreras interpuestas para garantizar en el segundo semestre del año la gestión anual.
-Cada uno de estos programas respondió a las expectativas excepcionales planteadas al inicio de la pandemia mundial; hasta los momentos registramos un total de 16.100 participantes, número que representa un gran alivio considerando todo lo novedoso que implicó reajustar una metodología formativa que nos ha servido para salir a flote y gozar de la receptividad del público trujillano, dijo Ortega.
En sus breves palabras el Jefe de Formación Profesional del Inces Trujillo sostuvo, delante de los presentes, que el reto planteado por el Covid-19 obligó a los trabajadores del ente a demostrar las capacidad para resolver problemas puntuales como las clases presenciales y cómo proseguir con una programación anual que amenazaba la efectividad de la atención al público trujillano.
Igualmente, analizar y evaluar los desafíos para el venidero año, toda vez que hasta la aparición de la vacuna contra el Covid-19, estas actividades se encaminan de forma vertiginosa y obligan a tomar las prerrogativas de ley para seguir formando a la ciudadanía como ha sido siempre en sus casi 61 años del Inces, señaló Marcos Ortega.