** En forma conjunta con el Circuito Judicial Penal de Yaracuy se busca atender al grupo de padres y jóvenes que a pesar de tener conflicto con la ley pueden ser reinsertados socialmente a través del manejo de oficios productivos obtenidos en el Inces
MARÍA ALEJANDRA ARIAS | Yaracuy
Luego de ser puestos en libertad, los 19 jóvenes que fueron aprehendidos por hechos violentos el pasado 23 de enero en Yaracuy, el Tribunal de Control, Sección Penal de Responsabilidad en el Adolescente, haciendo uso de sus facultades, otorgó la medida cautelar de incorporarlos a la Escuela para Padres Circuito Judicial Penal, con el fin de formarlos, por lo que en articulación con el Inces Yaracuy serán atendidos en diversos oficios productivos.
Darwin Camargo, coordinador del equipo técnico de la sección penal de responsabilidad del adolescente, adscrito al Circuito Judicial Penal en el estado, además de coordinador del programa de acompañamiento profesional a los padres, madres y responsables de adolescentes en conflicto con la ley penal, informó que la medida aplicada es estrictamente educativa por lo que el Estado brindará la debida atención de manera integral.
Asimismo indicó que se realizó una evaluación psicológica y la caracterización de los jóvenes para las diversas formaciones. También dijo que en el marco de su salud mental, se llevó a cabo un taller dirigido a los padres y madres con el fin de lograr la conexión emocional en el núcleo familiar y recuperar lo que se ha perdido, es decir, la autoridad, la obediencia y que comprendan que el ambiente natural de un adolescente es un aula de clases, una cancha deportiva, haciendo cultura, música, teatro, todo con fines netamente educativos.
Por su parte, Dalvi Torrealba responsable de la gerencia regional del Inces Yaracuy expresó: “Estamos atendiendo a este grupo de jóvenes que cayeron en las manos de la derecha apátrida que no hace más que utilizarlos como carne de cañón e intentaron incendiar a nuestro estado. Más allá de una sanción es hacerles entender que somos gente de paz y que debemos promover espacios para el debate, la recreación y la formación libre de violencia”.
Acotó que de acuerdo a esta realidad, el Inces ha abierto sus puertas para recibir a estos jóvenes y a sus padres y representantes con el fin de formarlos en áreas productivas como agricultura, construcción, herrería, carpintería, turismo, panadería, refrigeración, textil, electricidad, entre otras”. Puntualizó además que el Inces cuenta con el Programa Nacional de Aprendizaje (PNA), el cual les ofrece la oportunidad de insertarse en el ámbito laboral.
“Esa es la gran diferencia entre la revolución bolivariana y la derecha venezolana. Mientras inducen a la juventud a hechos violentos y de destrucción del estado, nosotros los recibimos con amor para formarlos para la vida y reinsertarlos a la sociedad. Es desde el estudio, el deporte, la cultura que se transforma un país y se construye al hombre y a la mujer nueva. Apostamos por una juventud con principios y valores humanistas y no violenta”, aseveró.
LT.