** Integrantes de dos cursos de Panificación Doméstica de los sectores 5 de Julio, San José, Santa María, Monseñor Iturriza, La Cañada, La Velita y Sabaneta aprendieron a elaborar diversidad de panes para impulsar ideas productivas en sus sectores comunitarios
MIRIAM GONZÁLEZ VILLARROEL | Falcón
El Pan fue el protagonista, en los espacios productivos del Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista (Inces) ubicados en el sector 5 de Julio en Coro, cuando 77 participantes realizaron una extraordinaria socialización de saberes, lo que conllevó a que se les entregara constancias por haber aprobado del curso: Panificación Doméstica, que desarrollaron a través de Programas Móviles de la institución.
Luego de culminadas las 186 horas de aprendizajes productivos, los nuevos panaderos elaboraron distintos tipos de panes: dulces, salados, campesino, rellenos, de mantequilla, hamburguesa, sandwich, de queso, donas tartaletas, golfiaos, tequeños, orejones, empanadas cachitos, galletas, pizzas y bombas entre otras delicateses para demostrar a los presentes los conocimientos adquiridos.
Leonor Martínez, coordinadora de Programas Móviles, resaltó los esfuerzos que desplegaron y mantuvieron los participantes desde el principio y hasta el final de la formación, “son los participantes, la fuerza motriz de la formación profesional del Inces, ustedes mostraron compromiso y responsabilidad; son la razón de ser del instituto, y es a ustedes a quienes nos debemos”.
Legado productivo
Por su parte el maestro técnico productivo (MTP) Edgar González, inició contando anécdotas que reforzaron la visión del curso, resaltando que son los participantes quienes dan vida a los espacios del Inces, lo cual es su gran satisfacción. Destacó González, “impartir conocimientos a las comunidades me llena de mucho regocijo, porque voy dejando un legado productivo en personas que serán los encargados de multiplicar los conocimientos adquiridos”.
El aprender-haciendo
De igual forma el participante Yovanny Coello, acotó, en el inicio de su intervención que el MTP Edgar Gonźalez mas que un facilitador es todo un maestro panadero a quien le deben todos los aprendizajes obtenidos. “La Panificación Doméstica, es un oficio que es bíblico, porque en todas las culturas del mundo el pan es el alimento de todos los días”.
Resaltó el empeño y la dedicación que día a día le imprimió el MTP a la formación, que fue un verdadero intercambio de saberes y experiencias, “aprendimos un oficio productivo”. Agradeció al Inces por acogerlos y transmitirles la iniciativa de formarse y producir para la emancipación, que trasciende hasta la familia.
“El aprender-haciendo se evidencia en todo lo expuesto en el intercambio de saberes, el MTP con toda su supremacía y pedagogía supo llegar a todos y cada uno de sus participantes”, puntualizó Coello.
Desarrollo productivo
Asimismo, la participante Carmen Medina, precisó que no fue fácil, pero se lograron los objetivos a pesar de las adversidades. Hizo énfasis en la experiencia del aprendizaje, “si se puede”.
Finalmente el grupo de participantes agradecieron el aporte que el Inces Falcón está dando a las comunidades falconianas,“Estamos convencidos que el aprender a elaborar una variedad de panes, contribuye a que nos desarrollemos productivamente”.
