** Al fortalecer el sector productivo alimentario se cuidan las futuras generaciones
NINOSKA A. PATRIZ S.
Desde el centro de formación socialista (CFS) Inces Textil se realizó la formación Alta Cocina. La misma contó con la seguidilla de cursos de: Elaboración de Tortas, Dulces, Pasa Palos y Panadería y Pastelería doméstica. Por su parte, estuvo a cargo de la chef maestra técnica productiva. Esta nos cuenta que se mantuvo en contacto con más de veinte participantes vía WhatsApp y correo electrónico, siempre que la señal así lo permitía.
Gigfrido afirma que lo más importante era constatar la realización de las actividades por parte de los participantes. Por tal motivo estableciendo conversatorios virtuales: “Se dieron a la tarea de describir con detalle los sabores y las texturas, complementando con fotos o videos paso a paso de más de 50 creaciones gastronómicas”, nos indicó la MTP. Entre algunas de ellas podemos mencionar: torta marmoleada, ponqués, donas, mermeladas para rellenos, dulces criollos y variada gama de panes: cachitos, quesadillas, golfeados, pizza y pan de jamón, preparándonos desde ya para el fin de año.
La adecuación del ambiente se impulsó según las posibilidades de los hogares. Por su parte, en el conversatorio final se obtuvo una variada galería virtual de rostros alegres. Y como herederos de la fuerza de Bolívar y de Chávez, demostraron consciencia y solidaridad social ante la situación de pandemia que nos ha tocado atravesar.
Vale destacar, como dato curioso, que los núcleos familiares se incorporaron de manera natural. Se puede afirmar que cada tarea asignada fue una actividad realizada con visión de reflexión y esperanza en el futuro. Esto solo es posible en revolución, donde la reinvención del hombre y la mujer, como ser humano, es vital para la siembra de valores y la cosecha de éxitos con los cuales se afianza el desarrollo del país.
