** En el Inces se forman los futuros actores y trabajadores de las artes escénicas de manera técnica profesional
Dimas Páez
F/Rafael Urbina
La Escuela de Medios y Comunicación del Inces (EMCI) celebró su tercer aniversario con una II Clase Magistral, esta vez Actuación para Cine, dictada por el actor y facilitador Yordano Marquina, quien cuenta con 24 años de experiencia. Durante la clase, Marquina aportó a los participantes los pasos que debe seguir un intérprete o actor para formar parte de un proyecto cinematográfico, abordando desde el encuentro con el guión hasta la creación del personaje.

Con motivo de su tercer aniversario, la EMCI ha programado diversas clases magistrales impartidas por facilitadores de amplia trayectoria, dirigidas a personas interesadas en incursionar en medios de comunicación, audiovisuales, locución, entre otras áreas. La escuela, ubicada en el piso 7 del edificio sede del Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista (Inces), continúa fortaleciendo la formación técnica y profesional en el sector.

Marquina explicó: “El enfoque principal estuvo en los pasos que debe seguir el intérprete o actor para integrarse a un proyecto cinematográfico”. Además, destacó la importancia del encuentro del actor con sus emociones y cómo utilizarlas para transmitir el mensaje o construir el personaje que interpreta en el cine. Los participantes también conocieron las técnicas más utilizadas para la interpretación, basadas en los métodos de Stanislavski y Meyer.

El facilitador también abordó aspectos técnicos del cine, como los planos, las secuencias y los roles de quienes intervienen en un rodaje. “Es fundamental que el actor conozca cómo desenvolverse en el set de grabación”, añadió Marquina.
Durante la clase, se explicaron las etapas de la producción cinematográfica: preproducción, que incluye el trabajo de mesa con actores y actrices; la grabación en el set; y la postproducción. Asimismo, se enfatizó en la importancia de la concentración del actor y el uso adecuado de las técnicas cinematográficas.
La participante Ámbar Hernández, licenciada en Artes Escénicas, expresó su satisfacción con las unidades curriculares ofrecidas por la escuela y resaltó el profesionalismo de los facilitadores. Para Hernández, el taller reforzó la necesidad de contar con herramientas psicológicas y físicas para establecer una conexión con el productor, el director y el personaje a interpretar.
Además, destacó la diferencia principal entre actuar en teatro y en cine: “En el teatro se puede ser más extrovertido y expandir el personaje, mientras que en el cine las expresiones deben ser más sutiles y contenidas”.
