En revolución los espacios urbanos también se engranan para la alimentación de la Patria
NINOSKA PATRIZ| Aragua
Contando con la bendición del cielo, el día de san Isidro, se inauguró el huerto que sirve para la práctica de cosecha y profundización de los saberes del campo. En ocasión del mismo, se realizó una misa, donde también se bendijeron las herramientas, la tierra y las semillas, y las manos de los agricultores. Cabe resaltar que también coincidió con el día del Agricultor, motivo por el cual, el acontecimiento fue muy emotivo. Luego, se desarrolló un ameno compartir en celebración de la vida. “Todos los días debemos dar gracias a Dios por cuantas actividades podamos realizar. La realización de las labores que nos gustan, ya no son un trabajo. Estas nos permiten estar de júbilo a diario y hacer con amor cada paso del oficio que seleccionamos” nos comenta el Maestro Técnico Productivo Gustavo Jiménez Mora.
Según pudimos conocer se cosechó maíz amarillo, previamente sembrado. En ésta época, el protagonista será el Jojoto. “Sin embargo, seguimos apostando a los rubros de ciclo corto. Pronto estaremos degustando sus diferentes variedades, gracias al procesamiento del mismo. Este rubro, combina muy bien en los hogares venezolanos, tanto cocido a leña, como transformado en Arepas, Cachapas, Majarete, Funche, Cotufas o Manjar. Por ser tan versátil, en cualquiera de sus versiones siempre ha sido un platillo delicioso para disfrutar en familia. De la misma manera, como consideramos que las actividades del huerto van viento en popa, estando próximos a terminar este curso ya nos alistamos para el próximo que es de Productor de hortalizas en espacios urbanos”, manifestó Jiménez.
“La siembra es uno de los trabajos mas complejos e importantes necesarios para la vida. En nuestras manos se encuentra la responsabilidad de apoyar a la Patria en la producción. Por ello, desde nuestras formaciones sembramos el saber para que nuestros participantes a su vez sean difusores. Los mismos acuden con agrado sin importar los obstáculos del devenir diario, pues el contacto con la naturaleza es por demás nutritivo y enriquecedor. Podemos decir que creamos conciencia del valor de la tierra y enseñamos a tratarla con cariño, como le amamos a nuestros hijos”, agregó el Maestro Técnico Productivo.
A paso indetenible de formación en formación.
Así mismo, en realce de los productos a base de harina que se pueden generar en la Gastronomía del País, la Profesora Sonia Rivero desarrolla un curso de Tequeños, Pasapalos y fines. De esta forma se enlaza el producto recién cosechado con su procesamiento. A ésta formación se le suma otro curso de primeros auxilios a cargo de los entes de seguridad y salvamento de la comunidad, en función de la prevención de accidentes que pueden presentarse en cualquier instancia. “El conocimiento de las acciones que debemos realizar en circunstancias adversas, nos permite saber que hacer en cualquier momento que se presente una emergencia. Los accidentes no avisan y prepararnos es nuestra obligación”, nos comentó la Profesora Rivero.