** Abuelos y abuelas recibieron formaciones en la Casa de Alimentación de Santa Ana en Palo Negro
NINOSKA PATRIZ| Aragua
Tomando en cuenta las venideras fiestas decembrinas, en el centro de formación socialista (CFS) “Cagua” se forman más de 30 participantes en Fabricación de Huertos Familiares. Durante el tiempo de aprendizaje los asistentes aprenden sobre obtención y preparación de semillas y bulbos para su siembra.
Las semillas se obtuvieron gracias a la colaboración de las cocineras de la Casa de la Alimentación, mejor conocida por los participantes y habitantes como la Casa de los Abuelos. Dentro de su formación, realizaron prácticas con la preparación de canteros y relleno del sustrato, además como parte de sus actividades, realizaron labores de limpieza, remoción de escombros, trasplante de musáceas y retiro de hijos de cambur.
También estuvieron realizando labores de recolección de estiércol, tomados de las caballerizas aledañas, en función de agregar materia orgánica en el sustrato y nutrir la preparación del compostero. Posteriormente, el material fue procesado para nutrir la siembra.
“Hoy día vemos clases teóricas y prácticas al respecto. Nuestros abuelos y abuelas, aprendieron esto desde pequeños, pues sembrar para ellos era el pan de cada día”, explicó el maestro técnico Gustavo Jimenez Mora, responsable de la formación.
Esta formación, en materia agroproductiva, pretende la incorporación de la cultura en relación a la conciencia alimentaria. Jiménez agregó que “su propósito es garantizar la autosustentabilidad de la Casa de Alimentación en el tiempo. Con estas actividades, se beneficia a más de 200 ciudadanos y ciudadanas de la comunidad; por este motivo existe mayor empeño y valoración hacia el complejo proceso productivo”.
Para esta ocasión se recolectaron aproximadamente 41 semillas de cebollín y 51 bulbos, a la espera de poder comenzar a cosechar en 110 días. Además, la siembra de frijoles desde la elaboración de un probador de germinación casera no se hizo esperar, y con gran espíritu productivo se organizó un conversatorio sobre la importancia de los pimientos y ajíes.
“La idea es que tanto participantes como sus familias se beneficien de la producción de hortalizas en áreas urbanas. Se busca con ello trascender hacia el procesamiento y conservación de los alimentos”, comentó el maestro técnico productivo.
Asimismo, se lograron más de 10 kilos de tubérculos pero en la comunidad de Bello Monte, municipio Libertador. Allí, la MTP Judith Palacios, responsable de los cursos del área Textil, fue la coordinadora de la actividad.
Las participantes junto a Palacios, sembraron yuca y algunas plantas de frijoles. Luego, cocinaron el fruto de su esfuerzo disfrutando y compartiendo sus conocimientos en colectivo. La responsable informó que próximamente iniciará en la comunidad de Los Aviadores el curso de Elaboración de Uniformes Escolares.
Certificación de saberes
Continuando con el ritmo que dictan las circunstancias, también realizaron certificaciones en materia de peluquería. Las jóvenes que optaron a esta certificación, realizaron una excelente labor humana al prestar sus servicios en atención a los abuelos.
Posteriormente, continuaron con un ejercicio motivador de bailoterapia como actividad cultural y de esparcimiento comunal. “La integración a las actividades, desde todo punto de vista, es de vital importancia. Sirve para afianzar los lazos con nuestro pueblo trabajador, al tiempo que ofrecemos nuestras formaciones Inces”, aseguró Jiménez.
Continuando desde la Soberanía alimentaria
Continuando con la visión productiva, el CFS Cagua, realizó la socialización del curso de Dulcería Criolla, en la Casa de Justicia de Palo Negro. Durante la exposición, se pudieron degustar delicias que prepararon las participantes de la formación. Entre ellas se pueden mencionar el tradicional dulce de lechosa, duraznos en almíbar, dulce de guayaba y de coco, entre otras; para finalmente entregar las constancias de culminación de curso.
