** Las adversidades de orden económico y social que podrían generar incomodidades al colectivo trujillano, en estos días no han sido inconvenientes para que el público acuda a la Gran Base de Misiones “Hugo Chávez” del municipio Valera e inscribirse en las formaciones de su preferencia
MARÍA CABRERA
La dinámica del 2020 inicia en el Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista de Trujillo con pie firme y conscientes de los distintos retos que en la parte de formación tiene el organismo en atención a las comunidades que durante 60 años han respaldado su labor pese a las grandes contratiempos que debe hacer frente todos los días.
Muestra de los anterior lo son las formaciones que el Inces Trujillo aperturó durante este semana tan difícil por la presencia de algunas adversidades de orden económico y social que podrían limitar el accionar del colectivo trujillano y aún así se apersonan a la Gran Base de Misiones “Hugo Chávez” del municipio Valera para inscribirse en la formaciones de su preferencia que estarán allí por espacio de un mes aproximadamente.
Tal es el caso de lo observado en los programas de Textil, Turismo, Nuevos Modelos de Gestión (NMG), y Agrícola donde los maestros técnicos productivos conscientes del panorama descrito, han flexibilizado la oferta formativa para que el público trujillano no se quede sin sus cursos solicitados.
Las gráficas que mostramos son elocuentes y determinan además la tranquilidad que se refleja en los rostros de ese colectivo que pese a los inconvenientes descritos y otros, siguen apostando al Inces-Trujillo pues saben que en este ente tienen alguien con quien contar en momentos cuando lo común, “es que todo está perdido”.
Elsa González, Sabina Parra, Héctor La Torre y Suhail Davila dan la cara y responde con la misma seriedad y regocijo agradecidos de la confianza y el cariño demostrado a cada uno de ellos que entienden y asumen es extensiva al Inces y a su masa laboral.
