** La cultura productiva es herramienta para alcanzar la independencia agroalimentaria, de la mano del “Formar produciendo, Producir formando”
HIRASYANEL BAYONA
Un total de 12 participantes de diferentes zonas del municipio capital iniciaron su preparación en el área agrícola, incorporándose a la formación Construcción de semilleros con Inces Barinas.
Magali Noguera, coordinadora institucional del Motor Agroalimentario en la región, quien tiene la responsabilidad formativa, aclaró, que al igual que el resto de las formaciones, esta también será desarrollada a distancia, acatando las aún vigentes orientaciones preventivas nacionales y regionales, en relación a la pandemia del COVID-19; por lo que serán utilizadas herramientas tecnológicas como correos electrónicos, grupos de chat telefónicos y videos llamadas.
Noguera informó que la formación se dará en tres fases:
1) Preparación de terreno (remoción y limpieza de malezas),
2) Desinfección del terreno (haciendo uso de cal y agua caliente y la aplicación de ceniza, todos en sus tiempos correspondientes, mismos que son aclarados en las sesiones formativas), y
3) Inicio de la siembra, teniendo en cuenta la época del año, tipo de tierra y rubros de consumo doméstico, los cuales puedan aportar la semilla para la elaboración de los semilleros, previamente conociendo los procedimientos necesarios para la correcta selección de la misma.
Asimismo, Noguera explicó que el semillero es el sitio más idóneo para que la semilla inicie su fase de desarrollo, proporcionando las condiciones adecuadas a las pequeñas plantas para que luego sean trasplantadas al terreno definitivo, y que se busca concienciar a los participantes en este sentido, indicándoles también la importancia de la buena ubicación del semillero, en un espacio donde sea posible controlar los cambios de temperatura, la caída de agua de lluvia, la humedad, los insectos o plaga y la entrada de animales, además de considerar la cercanía a fuentes de agua, mismas que faciliten su aplicación.
Una vez armado el semillero, los cuidados son sencillos, realizando en verano riego diario con un sistema de agua o lluvia fina como el que proveen envases plásticos desechables adaptados con múltiples pequeños orificios, simulando una regadera, y en época de invierno basta con que el procedimiento se realice cada dos o tres días, brindándole estas condiciones amplias posibilidades de que puedan avanzar con facilidad en el proceso formativo, desde la seguridad de sus hogares, guiados de la mano de Inces Barinas.