** Movimiento que fue considerado como uno de los movimientos políticos sobre las demandas sociales que convergerían en el complejo proceso de la independencia de Venezuela
MIRIAM GONZÁLEZ VILLARROEL
La Independencia es una de las etapas más complejas y polémicas de la historia de Venezuela, el 10 de mayo de 1795, en la hacienda Macanillas, en la Sierra de Coro en el estado Falcón, estalló un movimiento libertario que buscaba soluciones palpables para la igualdad social y la abolición definitiva de la esclavitud; dicha insurrección fue liderada por José Leonardo Chirino y hoy a 226 años de la gesta emancipadora en Falcón se recuerda al hombre que avizoró aires de libertad, que consagraron en los ideales de los libertadores para conseguir la independencia y vencer al yugo español.
La rebelión de los esclavos liderada por José Leonardo Chirino, fue uno de los hechos más importantes que sacudieron la consciencia de la sociedad colonial venezolana y la que puso a germinar la semilla para el nacimiento del movimiento derogatorio contra la esclavitud en el país. Chirino, fue un zambo libre con ideales revolucionarios que tenía como enfoque que se fundara una república con equidad y justicia social en la cual se reconocieran los derechos de los esclavos.
A fines del siglo XVIII durante el grito de rebeldía, Chirino y un grupo de mulatos, tomaron por sorpresa a los propietarios de la zona. Las haciendas fueron saqueadas, otras incendiadas y algunos blancos, dueños de las haciendas, heridos y asesinados. Se proclaman los principios fundamentales que caracterizaron la insurrección: con la aplicación de la “ley de los franceses”, que promovía las ideas de soberanía y libertad con la finalidad de crear una República donde se prohibiera la esclavitud y se destruyera el régimen basado en la servidumbre y la supresión de los privilegios y eliminación de los impuestos de alcabala.
Por su parte, la esposa e hijos de Chirino, también fueron sentenciados a ser separados y vendidos como esclavos en diferentes sitios de la Provincia de Venezuela. De esta manera, con la muerte de Chirino, se daba por concluida el capítulo de un levantamiento social que atentó contra la clase dominante y alteró el régimen establecido. Pese a ser una manifestación de carácter local el predicamento de Chirino es universal, porque ha pasado a simbolizar la lucha contra cualquier injusticia. Chirino,fue un hombre para la libertad, aspiración permanente e hilo conductor de la compleja trama sociopolítica que encararía Venezuela a inicios del siglo XIX.
La insurrección del 10 de mayo de 1795, aunque fallida, es considerada como uno de los movimientos políticos originarios que expresó en su tiempo las demandas sociales que confluirían en el complejo proceso de la independencia.
Finalmente el Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista, honra a este zambo, cuya causa libertaria y de igualdad social, se vislumbra a través de los centros de formación socialista (CFS) en el país que llevan su nombre, espacios educativos, donde se forman con educación productiva hombres y mujeres, venezolanos, para que a través del conocimiento conquisten sus ideales para la producción, para ser libres y soberanos, que viva ¡José Leonardo Chirino!.
