Saber usar las nuevas herramientas tecnológicas es clave en el comunicador de hoy

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*** A pesar del exceso de información, no tenemos más información. Tenemos gran cantidad pero no siempre acompañada de calidad

IVALDO RODRÍGUEZ

F/ Luis J. Gozález Cova

Con el objetivo de hablar sobre la presencia en las comunicaciones digitales y los grandes retos que enfrentan los comunicadores sociales en estos tiempos en Venezuela, se realizó este 10 de agosto organizado por el Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista (Inces) un conversatorio donde se planteó la humanidad en el periodismo, la necesidad periodística de adaptarse a las nuevas tecnologías, la obligación de verificar y contextualizar las noticias, la obligación de darle el lugar que merecen los comunicadores populares en Venezuela y el deber de no temer a los avances en la materia, fueron puntales dentro de las distinguidas intervenciones.

Está claro que venimos observando en los últimos 10 años esta explosión diversa y renovadora del periodismo en el país. Una señal que según algunos resulta fundamental para el fortalecimiento de nuestra democracia, así como de la democratización de la información en esta tierra de gracia.

Los panelistas encargados de las intervenciones fueron el presidente de YVKE Mundial Alejandro Silva y el periodista Alfer Unamo acompañados, desde luego, del presidente del Inces Wuikelman Angel, la plana gerencial de la institución y el universo institucional, a través de las redes.

Las charlas abordaron el periodismo y la obligatoriedad de preparar las casas de estudios para formar a los jóvenes en este oficio con el uso de las nuevas tecnologías, planteó Alejandro Silva, agregó la ineludible necesidad de usar los adelantos tecnológicos como herramientas evolucionadas para perfeccionar el hecho comunicacional y el inmediato requerimiento de execrar del pensamiento la posibilidad de que los nuevos adelantos llegan para desplazar a los comunicadores.

El periodismo siempre ha estado en constante cambio y es por ello que hoy, tanto los medios y las formas de enseñar se han transformado, por lo cual se hace imperativo que los profesores se reconviertan, porque el periodismo brinda insumos para que las personas tomen buenas decisiones, insiste Silva.

Hoy en día los medios han perdido su credibilidad y no se sabe en qué momento dicen la verdad, porque estamos enmarcados en la inmediatez, es decir, en sacar en el menor tiempo posible una nota antes que otro medio. “Hoy en día las redes sociales no te dan tiempo de verificar la información”, en opinión de Unamo.

Punto fundamental es el aspecto referente a la profesionalización y el empirismo del periodismo. El periodismo va más allá del saber escribir, manejar la tecnología y presentar un mensaje. Tener una formación en esta profesión está enmarcada en un conjunto de valores éticos que no se logran desde lo empírico.

Sencillamente ha llegado la hora de reconvertirnos con la esencia pura y sabia del periodismo, que consiste en aportar insumos a los ciudadanos para que tomen las decisiones de la mejor forma.

El periodismo está viviendo una etapa de grandes crisis. Estamos asistiendo a una doble realidad; una de índole tecnológica y otra económica. La gran competitividad por una parte, y la aparición cada vez más frecuente del uso de los nuevos medios tecnológicos, blogs, redes sociales y las nuevas formas de entender la actualidad, por la otra. Estos dos aspectos, presentan diversos problemas al mundo de la comunicación en Venezuela que resultan en la necesidad de revisar el tratamiento de asuntos intrínsecamente relacionados con el periodismo como la libertad de expresión donde la información ha pasado de tener un valor en sí misma, a la falta de credibilidad y fiabilidad arrastrada por la superabundancia de información a través de los medios tecnológicos. Por lo tanto, estamos ante un planteamiento de gran importancia, donde la verificación y el análisis del contexto juegan de manera preponderante en el hecho comunicacional.

A pesar del exceso de información, no tenemos más información. Tenemos gran cantidad pero no siempre acompañada de calidad. Ahora existe la obligación de saber determinar lo cierto de los falso ¿Qué se debe o no conocer en aras del bien social o nacional? ¿Existe libertad a pesar del flujo aparentemente incontrolado de Internet?, ¿Se debe frenar el ímpetu comunicacional de las personas que la ejercen? (no necesariamente periodistas). ¿Se deben atacar los infinitos comunicadores empíricos o saber compartir el tablero con ellos?.

Son variantes que requieren cavilación puesto que en definitiva la verdad absoluta no existe y la comunicación comunal antes de atacarla debe ser comprendida ya que es un nuevo fenómeno que responde a las realidades de su entorno.

Los medios de comunicación tienen el futuro asegurado, pero experimentarán una importante transformación, ya que la guerra más importante de la actualidad es la guerra comunicacional.

Sin duda, el periodismo ha sufrido cambios drásticos en la última década. Las nuevas tecnologías y la digitalización, han hecho que la actividad periodística sea muy diferente a la que se practicaba, por ejemplo, a finales del siglo XX. Las redes sociales, Internet, las fakenews y el nuevo ecosistema digital son las principales razones por las que muchos han pronosticado un gris futuro para el periodismo. Sin embargo, esto no es lo que piensa un comunicador perspicaz en Venezuela.

El periodismo vive tiempos de cambio. Hoy vemos, en el país y en el mundo, una amplia dinámica para producir y difundir información más allá de los conocidos medios masivos tradicionales.

A través de la popularización de Internet, la práctica del periodismo adquiere nuevos valores y perspectivas. La emergencia de nuevos medios digitales nos plantean otras formas de comunicar, nuevas narrativas más inclusivas, en formatos más creativos y principalmente con un mayor componente de compromiso social y político.

La seguridad en el entorno digital, las noticias falsas y los debates sobre la posverdad son algunos de los retos que enfrentan los periodistas en los tiempos contemporáneos y que serán abordados con experiencias, herramientas de utilidad y conocimientos aplicables.

Tiene igual relevancia concienciar que los mensajes producidos hoy llevan ataques contra la identidad, opina Unamo, en tanto que Alejandro Silva, luego de una densa intervención concluyó que es inobjetable la necesidad de contextualizar y verificar la información, casi ignorando la inmediatez ya que los elementos de la comunicación componen una estructura narrativa particular donde nada de los existente es casual y ello debe ser objeto de análisis. Es decir, hacer calidad, antes que cantidad.

El presidente del Inces Wuikelman Angel, quien abrió y cerró la tertulia, aportó que el Inces invita a los medios a formar conjuntamente las necesarias unidades curriculares para actualizar al comunicador; ofreció que el tema siempre estará en la palestra institucional Inces y que no se abandonarán los comunicadores populares, puesto que éstos tienen su propio valor local y comunal.