La resistencia indígena comenzó en 1493

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***Con la llegada de Colón a estas tierras comenzó la esclavitud y la pérdida de soberanía, donde se ocultaron el saqueo, el genocidio y la imposición de una cultura a sangre y fuego, e infinitas crueldades, lavadas y justificadas con una cruz y un libro

RODIN BUSTILLOS

De acuerdo a los estudios histórico, el 12 de octubre de 1492 no comenzó la resistencia, sino meses después, entre enero y febrero en 1493, cuando Caonabó, al frente de un grupo de indígenas, quemó el Fuerte de Navidad y dio muerte a los 38 o 39 españoles que se habían quedado, dedicados a violar a las mujeres, saquear y buscar oro, mientras Cristóbal Colón viajaba de regreso a España luego de toparse con tierras desconocidas, en un momento en que a bordo la tripulación fraguaba un motín.

Según el historiador Vladimir Acosta, las circunstancias en que Colón y su gente bajaron a tierra en la pequeña isla y fueron recibidos amigablemente por un grupo de nativos, de una manera ingenua y cándida, mientras Colón y sus acompañantes se fijaban en los colgantes de oro que llevaba aquellos seres desnudos. Los indígenas pensaban que aquellos barcos eran unas casas flotantes.

“Los indios los saludan admirados con una gran generosidad, salen en canoas a rodear los barcos. Colón desembarca contento de haberlos encontrado y desembarca con un pendón, un palo grandote que tiene una bandera verde y blanca con una cruz en el medio, que tiene una F de Fernando a un lado y una I griega del otro, Isabel, los Reyes católicos, y dos coronas encima, a tomar posesión de esa isla, donde acaba de llegar y a bautizarla como San Salvador, porque lo salvó del motín que amenazaba con estallar si no encontraba esa isla.

El intercambio con los indígenas es el primer retrato de lo que iba a ser la relación de la América con Europa, del conquistado, el colonizado, el humillado, contra el rico y el poderoso que se había apoderado de este territorio. Los intercambios que se dieron entre unos y otros: ovillos de algodón, frutas, agua, narigueras de oro, zarcillos, por un lado. Vidrios, espejitos, platos rotos, bonetes rojos, como los usados por Santa Claus, por otro lado.

En el cuarto centenario, en 1892, cuando España y Europa conmemoran la gloria de España. En el siglo XX denominan “día de la raza”, a la fecha. Las oligarquías criollas asumen la fecha junto a España. Los estadounidenses por su lado alegaron que a ellos los descubrieron los vikingos, hombres altos, fuertes y catires.

La sublevación de Canoabó, fue determinante para dar inicio a la resistencia indígena, y se comienza a descubrir a ese personaje, llamado Caonabó. A partir de allí de ese acontecimiento histórico comienza la primera guerra mundial en la que van a participar todas las potencias de la época. España, seguida por Portugal y en menor medida Inglaterra, Francia, Holanda, Rusia, Dinamarca-Noruega, Suecia y otras potencias europeas, compitieron por la exploración, conquista y colonización del continente americano, e introdujeron como esclavos a millones de personas secuestradas en África, lo cual llevó a procesos de disolución y anomia de cultura milenarias, así como al surgimiento de nuevas conformaciones étnicas, culturales y políticas. Otra consecuencia fue el aniquilamiento 60 millones de personas. Fue el más grande genocidio que registra la historia de la humanidad.

Con las riquezas que se llevaron de América se aseguraron dos siglos de hegemonía española. “El Siglo de Oro, todas las bellezas del barroco tardío arden con el combustible del aceite americano y, traspasadas esas riquezas al resto de Europa, son el primer movimiento de la Revolución Industrial y del capitalismo. Carlos Max señala que en los orígenes del capitalismo primitivo están las riqueza traídas de América y que por eso el capitalismo da sus primeros pasos y llega a la historia sudando sangre y barro por todos sus poros e inmundicia, según el historiador Luis Brito García, todo eso tiene que ver con el 11 de octubre”, dijo.

La nueva festividad se proclamó para conmemorar la resistencia de los nativos americanos contra los conquistadores. Fue decretada de tal modo por el presidente Hugo Chávez y sancionada por la Asamblea Nacional de Venezuela como festividad en el decreto 2028, con fecha del 12 de octubre de 2002.

Dos años después del decreto, durante la segunda celebración del “Día de la resistencia indígena” se originó una sonada controversia que involucró a varias organizaciones cercanas al gobierno de Hugo Chávez, debido al derribo de una estatua de Cristóbal Colón en la Plaza Venezuela de Caracas.