NUEVA ESPARTA | Destacan las bondades del plan penitenciario del Inces

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** El Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista Inces de Nueva Esparta está comprometido con el «Programa Penitenciario» que está demostrando ser beneficioso para los privados de libertad en la región. Este programa no solo proporciona herramientas esenciales para su reinserción en la sociedad, sino que también resalta el valioso trabajo de los maestros involucrados

 

El pasado 15 de enero, la coordinadora del Programa Penitenciario Inces de Nueva Esparta, Mayerlyn Castellano, junto con la profesora Fanny Rojas y el profesor Luis Maya, visitaron la Sala de Resguardo y Retención Preventivo Los Robles para presentar y explicar las actividades del programa «Bachillerato Productivo» a las privadas de libertad. Además, entregaron libros de la colección Bicentenario, evidenciando el compromiso del Inces con la educación y el desarrollo de habilidades de las personas privadas de libertad.

 

También la coordinadora visitó el Centro de Internamiento de Menores Los Cocos junto con la profesora Celena Farías, donde dedicaron palabras de «Ética para la Vida» a los menores y donaron al centro libros de la colección Bicentenario. «Los muchachos están interesados en aprender un oficio productivo, y nosotros estamos a su disposición», fueron las palabras de la maestra Celena, quien cuenta con varios años de experiencia atendiendo a esta población.

 

Durante la visita, se manifestó el propósito del Inces en relación a los perfiles productivos ofrecidos, subrayando la importancia de brindar oportunidades de aprendizaje que les permitan a los participantes adquirir habilidades prácticas y conocimientos útiles para su futuro.

 

Además, se llevaron a cabo reuniones con enlaces municipales de distintas misiones con el fin de atender las solicitudes del punto y círculo, demostrando el compromiso del Inces con la colaboración interinstitucional para el beneficio de la comunidad penitenciaria.

 

Este enfoque integral del Inces hacia la educación y la formación productiva de las personas privadas de libertad es un ejemplo claro del impacto positivo que puede tener una educación de calidad en el proceso de reinserción social.